Sobre el 82% móvil y otras yerbas

Adherimos al documento de los compañeros de la Agrup. Lucia Cullen: Sobre el 82% móvil y otras yerbas                  (Por qué no creemos que el lobo vaya a cuidar a Caperucita) Procuramos develar, desocultar, la realidad en que vivimos. Sabemos que a veces una situación se nos presenta de determinada manera porque la hemos “naturalizado”, percibimos de ella sólo sus aspectos exteriores, sin ver en realidad su esencia, que permanece encubierta. Las Ciencias Sociales pueden ser una valiosa herramienta en esta tarea de “develar”. Así, por ejemplo, los proyectos y medidas muchas veces proclamadas o demandadas no pueden ser escindidas de los actores que las impulsan, las reclaman, o simplemente las repiten hasta desgañitarse. Por eso, cuando hoy nos hablan del 82% móvil, nos preguntamos ¿quién me lo dice? Respuesta: La derecha organizada de nuestro país, la oligarquía. Los mismos que impulsaron golpes de Estado cuando sus negocios lo requerían. ü       Los mismos que redujeron 13% las jubilaciones cuando fueron gobierno. ü       Los mismos que multiplicaron hasta dimensiones astronómicas la dependencia de nuestro país de los organismos internacionales de crédito. ü       Los mismos que remataron “las joyas de la abuela”, en la infamia de las privatizaciones. ü       Los mismos que se opusieron a la re-estatización de los aportes de los jubilados. ü       Los mismos que impulsaron el modelo de “relaciones carnales” con los Estados Unidos. No es posible separar el proyecto que se discute hoy del 82% móvil de los actores que lo plantean y del proyecto nacional de exclusión y ajuste que esos mismos actores encarnan. Otro sería el escenario si se hubiera puesto sobre el tapete y como condición, la disputa sobre el financiamiento de la propuesta (ase fundamental de cualquier política pública con aspiraciones reales); la restitución de los aportes patronales; gravar las ganancias extraordinarias a los entrañables aliados políticos de la derecha; o el avance concreto sobre la renta a la especulación financiera. En ese contexto imaginado, hoy estaríamos discutiendo con la responsabilidad y el compromiso que la coyuntura nos requiere, alternativas y medidas sustentables que signifiquen realmente mayor dignidad e igualdad social para nuestro pueblo. Pero no. La historia se vuelve a repetir: consiste en desgastar y destruir los logros alcanzados colectivamente mediante un doble discurso con supuesto carácter progresista. Porque la derecha necesita que determinados espacios autoproclamados de izquierda le armen el juego propicio para imponer sus históricos intereses oligárquicos; esta vez, encubiertos detrás de propuestas demagógicas que sabemos, poco tienen que ver con la realidad social deseada por los sectores conservadores. ¿O acaso podemos pensar ingenuamente que al PRO, la UCR, la Coalición Cívica Libertadora y al Peronismo Federal le importan las vidas de Don Juan, Doña Juana y el resto de nuestros jubilados? Más bien huele a oportunismo político destituyente apoyado sobre las espaldas de los jubilados. Y además, porque pensar que dichas conquistas se obtendrán entregando y resignando los derechos y necesidades de los jubilados a los mismos depredadores de siempre, mediante alianzas con los responsables más nefastos de los ajustes neoliberales, es un disparate tal que no tiene pies ni cabeza. O tal vez sí tiene una clara cabeza mentora, la de los que se creen los eternos dueños de la patria. ¿Se ignora que que desde 2003 a la fecha, el haber mínimo se incrementó en un 597,8%? ¿Es casualidad que, en la actualidad, 87% de los adultos en edad jubilatoria tienen cobertura previsional mientras que antes del Plan de Inclusión Previsional la cobertura sólo alcanzaba al 55%? Desde la Agrupación Lucía Cullen respaldamos hace años los reclamos de los jubilados de nuestro país. Los acompañamos durante muchos miércoles de marchas. Los acompañamos cuando en los ´90, y más tarde en el gobierno de Dela Rúa, fueron sometidos a un brutal proceso de despojo. Apoyamos la ampliación de la jubilación a los trabajadores sin aportes. Apoyamos el aumento periódico de sus aportes, hoy previstos a través de una ley. Todavía falta, y por eso seguimos apoyando sus reclamos en función de sus necesidades que, sabemos, aún no están resueltas. Pero de ninguna manera nos aliamos con la oligarquía golpista, sus secuaces de derecha o los de izquierda. AGRUPACION LUCIA CULLEN ESTUDIANTES, GRADUADOS Y DOCENTES DE LA CARRERA DE TRABAJO SOCIAL - UBA